Sé quién tiene que dar el paso, y soy yo. Así que recorto la
distancia que nos separa y lo beso. Le agradezco que me entienda y que sepa que
no he pasado por mi mejor momento, ya que impide que el beso se llene de
pasión. Sólo es un beso lleno de ternura, justo lo que necesito ahora mismo.
Cuando nos separamos, lo abrazo con fuerza y pego mi cabeza
a su pecho, como solía hacer antes, y me lleno del sonido de los latidos de su
corazón. Sólo nos separamos para sentarnos. Después me tumbo en el sofá,
apoyando la cabeza en sus piernas mientras él me acaricia el pelo.
-No sabes cuánto deseaba que llegara este momento. -
susurra.
-Siento haberlo retrasado - contesto cerrando los ojos y
sonriendo.
Me siento aliviada porque es eso lo que he estado haciendo:
retrasar lo que sabía que ocurriría en cualquier momento. Lo único que he hecho
durante todo este tiempo ha sido dañarnos a ambos. Y, aunque aún hay cosas que
me impiden estar del todo feliz conmigo misma, decido aprovechar al máximo
estos minutos de paz.
-Estás perdonada - responde, y me da un beso en la frente.
-Podríais quedaros Estefi y tú a dormir aquí.
-¿Y crees que le gustará la idea? - Pregunta divertido.
-Por supuesto que no - respondemos Estefi y yo al mismo
tiempo mientras ella entra en el salón - Pero, ¿qué remedio tengo?
Así que eso hacemos. Esa noche de principios de julio
dormimos juntos en el salón: Estefi y yo, cada una en uno de los sofás; y
Adrián lleva un colchón al lado de mi sofá. No soltamos nuestras manos en toda
la noche.
Cuando despierto, ambos siguen durmiendo, así que suelto la
mano de Adrián con cuidado y voy a la cocina a preparar el desayuno. Está
bastante bien ver lo animadas que se han vuelto las cosas durante estos meses,
en los que el estrés de los estudios no han dejado de hacer acto de presencia.
En unos meses todos nos separaremos para estudiar en diferentes universidades,
excepto Juan y yo, cuyo destino parece ir ligado.
Cuando terminamos de desayunar, limpiamos la cocina y Adrián
y Estefi se marchan a cambiarse de ropa.
-Dale un besazo a Isa de mi parte - le grito a Estefi desde
la cocina antes de que se vaya.
-No sé cómo puedes quererla tanto, es el diablo
personificado.
-Tú al menos tienes un diablo en casa.
-Se lo daré.
-¿Y para mí no hay beso? - Pregunta una voz detrás de mí al
mismo tiempo que unas manos me cogen de la cintura y me hacen girar.
-Por supuesto que sí - contesto sonriente.
Adrián me levanta del suelo y me besa. Inspiro con fuerza,
llenando mis pulmones de su aroma, que no ha cambiado en este último año.
-Nos vemos más tarde, ¿no?
-Por supuesto.
Ambos se marchan y me quedo sola. Decido limpiar un poco y
así trascurre la mañana, hasta que suena el timbre. Corro a abrir la puerta,
esperando encontrarme con Adrián. Pero no es él. Es alguien a quien no veo
desde hace mucho pero al mismo tiempo veo todos los días.
-¡¿Qué haces tú aquí?!
ya se ,mm creo es Josh XD ,necesito el otro ...un besote
ResponderEliminarJajajajajaja qué seguridad x)
EliminarYa veremos que pasa en el siguiente :)
Un besazo!
Ooooh espero q no cometa un error ana aver a qien elegira
ResponderEliminarbesos
rubi
Ahhh no sé, no sé xD
Eliminar¿A quién elegirías tú teniendo en cuenta TODO lo que ha pasado?
Besos ^^